Discurso oficial pronunciado por el licenciado Bernardo Alvarado Tello en conmemoración del CIV Aniversario de la Independencia Nacional ante el Gobierno de la República, Cuerpo Diplomático, Municipalidades, distintas Corporaciones y vecinos de la capital. --

Guatemala, Guatemala : Tipografía Nacional, 1925.

23 p. ; 19 cm.

Digitalizado por Biblioteca Ludwig von Mises de la Universidad Francisco Marroquín, como parte del proyecto con el Internet Archive

Modo de acceso: Internet

Tomado del texto: Señor Presidente de la República: Honorable Cuerpo Diplomático: Señores: Día de intenso regocijo, de profundas emociones cívicas, en que la Patria, fatalmente disgregada, suma un año más a su vida independiente y, con ojo de cíclope, inquieta y anhelosa, pasa revista a sus filas y sigue señalando, con el índice inexorable de la Historia, la senda del deber hacia la meta de un porvenir glorioso. Día inmortal en que la insignia legendaria, acariciada por aires perfumados, ondea majestuosamente, rindiendo su ofrenda de gratitud, a los luchadores de ayer y saludando a los que, con júbilo inusitado, al compás de músicas marciales y cánticos patrióticos, celebran el CIV aniversario en que Centro-América, tierra paradisíaca de nuestros mayores, que entre volcanes y jardines, forma el bloque granítico que une dos razas y separa dos mares, escribió con caracteres de oro, en el gran libro de los destinos humanos, su entrada triunfal al concierto de las nacioners libres.

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